Comprar un protector es una inversión que a la larga va a beneficiar al mantenimiento del colchón y a tu salud. Comprar un colchón de calidad y no cuidar su mantenimiento es un error que no tendrías que cometer. Los colchones nuevos tienen unas características técnicas iniciales que pueden cambiar si no se tiene cuidado en mantener al colchón libre de humedades, bacterias y ácaros. Además, el colchón tendría que estar perfectamente aireado e higienizado para evitar alergias u otros problemas que puedan repercutir en la salud.

¿Qué protector elijo para mi colchón?

Una vez comprado el colchón, el siguiente paso sería comprar un protector para mantenerlo en perfecto estado por más tiempo. El protector debe ser de la misma medida del colchón para que se ajuste perfectamente a toda la superficie. Las cremalleras o elásticos rizados de las esquinas ayudan a que la superficie quede perfectamente plegada y lisa. Los protectores van directamente encima del colchón, por lo que tienen que ser transpirables.

Para saber qué protector elegir hay que saber qué tipos de protectores hay.

Tipos de protectores

Protectores termorreguladores

Si en las noches de verano te despiertas sudando a media noche y en invierno te da repelús meterte en la cama, es que necesitas un protector de colchón que sea termorregulador. El control de la temperatura del colchón es un factor que incide directamente en la calidad del sueño. Mantener el mismo nivel de temperatura corporal mientras dormimos se consigue utilizando tejidos inteligentes que regulan la temperatura; absorbiendo, almacenando y liberando el calor según la necesidad, creando un microclima para conseguir el mayor confort mientras dormimos.

Protectores impermeables

Las humedades son una de las principales causas de por qué un colchón se deteriora antes de tiempo. El cuerpo genera humedades que pueden provocar desde simples manchas hasta alterar la forma originaria del colchón. Los protectores impermeables se ajustan al colchón perfectamente con unos elásticos, protegiendo al colchón de posibles humedades e impidiendo la aparición de moho. Los protectores impermeables son muy solicitados para niños o para personas mayores.

Protectores antiácaros

Las capas de tejidos y espumas de los colchones son un nido fácil para la acumulación de ácaros, bacterias y otros microorganismos que hay que mantener a raya con un protector de colchón antiácaros. Estos protectores mantienen al colchón libre de microorganismos con tratamientos hipoalergénicos.

Recuerda que la protección, además de alargar la vida de tu colchón, hará que tu descanso sea más confortable y saludable.

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